Quien concentra su atención en su interior antes de iniciar cualquier proyecto y se cuestiona profundamente si realmente cree que lo logrará, aun a pesar de las adversidades, o de los que opinan que es imposible, obtiene un sabio autocontrol y liderazgo sobre sí.

Las Cinco Propulsoras de la Venta Exitosa

- Auto Dirección: Para ser un director efectivo de un equipo de ventas, comience por usted. Mantener una actitud positiva, un enfoque proactivo para con las personas y situaciones cuando se lidera un equipo de ventas exitoso. Rendir cuentas de las ventas a una organización puede ser una responsabilidad estresante. Un líder efectivo está continua y conscientemente, en el proceso de ser un mejor líder y poniendo el sistema en su lugar para obtener los resultados.

- Habilidades con las Personas: Como un líder efectivo de ventas, tiene que desarrollar confianza, respeto, y empatía antes de intentar influir en los demás, en sus actitudes, en sus comportamientos o en su desempeño. Los líderes de ventas efectivos proyectan una preocupación para los demás, quieren entender qué es lo que motiva a las personas que dirigen y que están habilitados para motivar y para obtener el máximo rendimiento.

- Habilidades de Proceso: Para dirigir a otras personas de ventas de manera efectiva, usted tiene que reconocer las necesidades para que el proceso dé resultados. Muchas personas ingresan a la venta porque son buenas en entablar relaciones. Ayúdelas a capitalizar sus habilidades en entablar relaciones desarrollando un proceso efectivo para aprovechar esas relaciones.

- Comunicación: Una comunicación efectiva exitosa conecta a las personas y a los procesos. Los líderes efectivos ponen un gran valor en desarrollar una comprensión real. Ellos buscan activamente sugerencias y aportes. Ellos demuestran la habilidad de motivar y son capaces de persuadir exitosamente a los demás.

- Responsabilidad: Los líderes de ventas efectivos saben acercar la brecha entre el rendimiento esperado y los resultados reales. Ellos tienen la responsabilidad por ambos, resultados personales y del equipo. Las personas que dirigen respetan sus habilidades de entrenar y educar para lograr objetivos organizacionales.